Alegatos de un siervo cansado, que te hizo frente una vez.
Rompí las cadenas de un esclavo, que ayer me delato.
No puedo, no puedo, clavado en la pared, con ecos y alaridos.
Nuevos corazones mas serán desilusión, todo se aprendió.
No nos hace falta otra tempestad.
Con ángel demencial, condena aniquilar.
Piruetas para atrás, bardo, dispersión.
Tu trance singular trajo devastación.
No nos dejaste nada, ni para sobornarte.
Suena en una orquesta de ocasión partituras de salidas,
marchas de triunfo que no son más que manchas sin color.
No me agaché para besar tus pies, necesito tu perdón.
Nada explica más a la verdad, que la anulación.
Te di casi todo,
no quieres algo más,
no quieres algo más.
Porque me negás el Sol?
Justo a mí que te lo cuido tanto.
lunes, 2 de agosto de 2010
Elaborado y traído a su mesa por
Vic Granada
Estoy hablando de
música
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
ni que lo digas!
Ruego, la voz de Cordera en ese tema es asesinable ♥
Publicar un comentario